

Este artículo está extraído del libro de la Dra. Jess, Hot Sex: Tips, Tricks and Licks (2013).
El sexo oral no siempre se trata de arrodillarse. El mejor sexo oral (piense en la recompensa) puede hacerse de pie o sentados a la mesa, a través de una comunicación real y honesta. Hablar con su pareja es probablemente lo más importante que puede hacer para cultivar una relación sexual candente. ¡Así que empiece a hablar!
Puede que no sea fácil de hacer, pero cuanto más practique, más fácil será. Si un tema es incómodo, use estos cuatro consejos para comenzar:
Este artículo está extraído del libro de la Dra. Jess, Hot Sex: Tips, Tricks and Licks (2013).
El sexo oral no siempre se trata de arrodillarse. El mejor sexo oral (piense en la recompensa) puede hacerse de pie o sentados a la mesa, a través de una comunicación real y honesta. Hablar con su pareja es probablemente lo más importante que puede hacer para cultivar una relación sexual candente. ¡Así que empiece a hablar!
Puede que no sea fácil de hacer, pero cuanto más practique, más fácil será. Si un tema es incómodo, use estos cuatro consejos para comenzar:
Hable cuando sea el momento adecuado.
Iniciar una conversación seria sobre el sexo justo antes de que esté a punto de ponerse romántico no siempre es lo ideal. Así que reserve algo de tiempo para hacerlo: comience a hablar sobre el sexo mientras estén tomando un café, almorzando o conduciendo al trabajo.
Sea honesto consigo mismo.
Para comunicarse efectivamente con su pareja, primero necesita saber exactamente lo que quiere. Tómese un tiempo para anotar sus necesidades, así como sus mayores temores. Llévelo a la mesa cuando hable con su pareja y sea honesto acerca de sus vulnerabilidades e incertidumbres.
Hablar abiertamente sobre sus inseguridades ayuda a su pareja a comprender su perspectiva y reduce la probabilidad de que manifieste esos problemas de una manera desfavorable (y menos atractiva) en una fecha posterior.
Hacer peticiones, no dar quejas.
Hable sobre sus posiciones más candentes y tenga en cuenta que el sexo es un tema sensible.
Defina sus sentimientos personales, en lugar de ataques y acusaciones. Si hay algo que su pareja hace que lo vuelve loco (y no de una buena manera), intente expresarlo en términos de preferencia en lugar de críticas: "Prefiero cuando chupas fuerte en lugar de hacer cosquillas con solo la punta de la lengua". "La sencillez y el tacto no tienen por qué ser eliminados".
Escuchar y hacer preguntas.
La conversación sexual será más fácil y suave si se trata de un intercambio bidireccional en lugar de una conferencia. Si es naturalmente más inclinado a la expresión verbal que su compañero dé un paso atrás y anímelo a que se abra para que las conversaciones no sean unilaterales. Escuche atentamente y pida aclaraciones según sea necesario.
¿Cuál es la mejor manera de hablar con su amante de sexo? Lea este extracto del libro del Dr. Jess, Hot Sex: Tips, Tricks and Licks.
Dr. Jess







